Cada vez es más alarmante la adicción que tienen algunas personas por los videojuegos, sobre todo niños y adolescentes, y en casos extremos su afición les ha costado la vida. Ese fue el caso de Pavel Matveev, un adolescente ruso de 15 años que tras perder en un juego de computadora sufrió una crisis nerviosa, salió a su patio, tomó la motosierra y se cortó la cabeza, de acuerdo con información de The Sun. Una fuente anónima declaró al medio citado que el chico pasó horas jugando, pero hasta ahora no hay más detalles sobre el macabro caso.
Hasta el momento las autoridades siguen investigando el aparente suicidio, pero se sospecha que el adolescente fue incitado por un “grupo de la muerte”, que ya ha cobrado de la vida de otros menores por medio de juegos en línea y redes sociales. De acuerdo con Mirror, entre noviembre de 2015 y abril de 2016, un aproximado de 130 niños y adolescentes originarios de Rusia se quitaron la vida y gran parte de ellos pertenecían a algún “grupo de internet”.
