El pastor evangélico, Pablo Ureña, coordinador del Programa Niños por Una Esperanza, realizó la mañana de este martes una vigilia por la salud de la niñez en la parte frontal del Hospital Infantil Regional Universitario Dr. Arturo Grullón en esta ciudad. Ureña aprovecho la ocasión para quitarse la barba con la que llevaba años en una intensa lucha en reclamo de que las autoridades gubernamentales y del Ministerio de Salud compraran el tomógrafo y el UPS para el centro de salud. El prelado evangélico dijo que la próxima lucha será porque los quirófanos sean terminados en ese centro de salud.
